Se cayeron y su estruendoso ruido replicó en todo el ámbito empresarial sanjuanino, sobre todo del que fuera en su momento el “selecto” grupo de los proveedores del Estado. Urbino, la empresa de los hermanos Benedetti se estrelló contra el suelo en un escandaloso caso de empresas que hacen “negocios” con la Provincia.
No hubo red de contención esta vez, los esfuerzos de su amigo Gioja no fueron suficientes ante tan escandaloso caso. Después de muchos años de lucrar con el estado provincial los Benedetti estallaron. Ya no sirvieron los favores a algunos funcionarios y su caída fue recibida con algarabía por los proveedores honestos y por todo el pueblo de San Juan “harto de ver como se enriquecen estos corruptos” expresó un agente financiero sanjuanino.
Vaciamiento de empresa, con evasión al fisco nacional léase fraude fiscal a la AFIP calculada en casi 24 millones de pesos, desfalco a sus propios empleados por haberse quedado con casi 3 millones de pesos en aportes para la obra social y jubilación de los ex empleados son solo algunas de las perlitas de los Benedetti sumadas a la falsedad ideológica de sus presentaciones fiscales.
En este caso los tristemente célebres hoy hermanos Benedetti se quedaban con los aportes de sus empleados. ¿Para que tanta angurria? ¿Por qué desfalcar a sus propios empleados con sus aportes jubilatorios? Porque esa angurria no tiene límites y todo esto deberán explicarlos en sede judicial.
“Si yo fuera empleado de estos delincuentes les partiría un fierro en la cabeza porque les truncaron su futuro a empleados que les fueron leales por décadas. Esta gente no cambia más, pero ya se venía venir, esto no ocurre de la noche a la mañana venían haciendo esto desde hace décadas. Lo que pasa es que ahora su “padrino” político (Gioja) no pudo hacer nada ante la exuberancia de las pruebas en su contra. Es demasiado estafar a sus propios laburantes”, explicaba hoy con rabia un jubilado de Urbino.
Con el padrinazgo de Gioja según explican antiguos amigos cercanos de los Benedetti debilitaron y empobrecieron al Estado, afectando a la calidad de los servicios públicos y los recursos a ellos asignados.
Incrementaron el esfuerzo fiscal que deben soportar los ciudadanos corrientes o las PYMES. O sea, perjudicaron a todos los sanjuaninos.
Deterioraron los objetivos de redistribución de la riqueza previstos por la legislación además crearon situaciones de competencia desleal entre operadores económicos que pagan impuestos y quienes los evaden.
En buen romance su desfalco al Estado deteriora la confianza de la ciudadanía con este mismo Estado.
Soberbia plena
Como todos los que montados en su soberbia no les importa robar a plena luz del día, cayeron como aves rapaces y su futuro es negro.
¿Pero que significa la evasión fiscal por lo cual se los juzgará? Como ya lo expresamos en esta misma nota, haber debilitado y empobrecido al Estado, afectando a la calidad de los servicios públicos y los recursos a ellos asignados. Debilitaron y empobrecieron al Estado, afectando a la calidad de los servicios públicos y los recursos a ellos asignados.
Lo hecho por Urbino y sus dueños los Benedetti según la fría letra escrita incrementa el hastío de los sanjuaninos ante la impunidad con la cual se mueven algunos empresarios.
En buen romance sus fechorías significan un gran agujero negro para todos. “Se afanaron la guita y el futuro de todos y esto incluye a todos los sanjuaninos” concluyó un ex empleado.
Ahora veremos como sigue la historia y estaremos atentos a que se cumplan las leyes sin ninguna presión política. Los Benedetti tenían respaldo político. Son amigos de Gioja, lo que no lo involucra si es que no hizo gestiones por este grupo. Pero no les alcanzó para terminar de empobrecer a la Provincia, afortunadamente.
Ojalá se cumpla la Ley y que los responsables paguen por sus delitos.
El pueblo de San Juan necesita volver a creer.
