La recesión económica no da alivio a la población española, que ya sufre una tasa de desempleo del 27,16% y afecta a más de seis millones de personas en el primer trimestre de 2013, una cifra histórica en este país.
Un año después de aplicar una flexibilización del mercado laboral para fomentar la contratación e inmersa en una recesión que amenaza alargarse durante 2013, España registra 6.202.700 parados, 237.400 más que en el trimestre anterior, según las cifras publicadas el jueves por el Instituto Nacional de Estadística.
Una de las caras más trágicas de esta situación la sufren los jóvenes del país, con una tasa de paro de 57,22% entre los 16 y 24 años, contra 55,13% en el trimestre anterior, una coyuntura que empuja a muchos de ellos, incluso con títulos universitarios, a emigrar al extranjero para buscar trabajo.
Con estos datos, España se sitúa justo detrás de Grecia que, con un 27,2% de paro en enero, es el miembro de la Unión Europea con una tasa más alta de desempleo, ambos muy por encima de la media comunitaria que se encuentra en un 12%, según las cifras del Eurostat.
En medio de una profunda crisis social agravada por el amplio programa de austeridad aplicado desde que llegó al poder a finales de 2011, el Gobierno conservador de Mariano Rajoy anunciará el viernes nuevas reformas económicas para redirigir el país hacia el crecimiento y que, en principio, no conllevarán nuevos recortes significativos.
Con manifestaciones habitualmente pacíficas por toda España debido al agudo malestar de una sociedad ahogada por el rigor, una plataforma de discurso radical llama a "asediar el Congreso" de los diputados el jueves por la tarde para conseguir "la caída del régimen".
La policía, que prepara un fuerte despliegue de agentes antidisturbios, ya arrestó el jueves por la mañana a cuatro miembros de grupos anarquistas equipados con bengalas, gasolina y petardos que "se disponían a quemar una entidad bancaria".
La mala situación del mercado laboral español, acusado de un desempleo endémico que en tiempos de bonanza económica apenas bajó del 8%, se agudizó en el último trimestre de 2012 con un aumento de 187.300 parados, superando el 26,02% de la población activa a final de diciembre.
La galopante progresión persistió entre enero y marzo, pese a las garantías dadas el miércoles por el jefe de Gobierno, Mariano Rajoy, de que el crecimiento del desempleo en este primer trimestre sería "el menor de los últimos años".
La situación ha sido descrita como "dramática" por la secretaría de Estado de Empleo, Engracia Hidalgo, quien formuló su deseo de que España "vuelva a ser pronto un país de oportunidades para todos".
El INE señala que este nuevo aumento del desempleo afecta "prácticamente a todos los grupos de edad, especialmente al de 25 a 29 años" que pierde 69.900 ocupados y "prácticamente a todas las comunidades autónomas", con Andalucía a la cabeza con 36,87% de desempleo.
Muestra significativa de la "fractura social" de la que alertan todas las organizaciones humanitarias es el número de familias con todos sus miembros en paro, que ya son 1.906.100 sobre un total de 17 millones en una población de 47 millones de habitantes.
A este nuevo empeoramiento del desempleo se le suma el retroceso del Producto Interior Bruto en el primer trimestre durante el que, según la primera estimación del Banco de España, se contrajo un 0,5% después de que la economía cayera un 1,37% en 2012.
En crisis desde el estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008, España, gobernada desde diciembre de 2011 por el partido conservador, inició en 2012 un amplio programa de austeridad para ahorrar 150.000 millones de euros hasta 2014, que ha agravado el retroceso económico y disparado el desempleo.
Aunque inicialmente pronosticó una contracción del 0,5% en 2013, el Gobierno admitió esta semana que la economía española caerá entre un 1% y un 1,5% este año.